miércoles, agosto 23, 2006

Episodio 1 - Traslado a Madrid

Al igual que la famosa serie de Guerra de las Galaxias, en la cual, después de transcurrido muuucho trecho de historia, sacaron el Episodio 1 contando la historia desde el comienzo, vengo yo, quien luego de estar ya tanto tiempo fuera de Venezuela, salgo a escribir un poco sobre cómo es que he llegado hasta aquí, hasta el medio del desierto de Kuwait.

Para los que no lo sabían, actualmente me encuentro en Kuwait, en la construcción de un proyecto para la Kuwait Oil Co. (K.O.C.) y en teoría debería de estar por estas tierras de Alá hasta el primer trimestre de 2008. Mi familia se mantiene en Caracas, por lo que cada cierto tiempo (en teoría cada 3 meses), tengo la opción de viajar a verles o ellos pueden encontrarse conmigo. La última vez que fui a Venezuela fue en las Navidades pasadas (2005) y posteriormente a eso, fue mi esposa Maite, quien vino a visitarme mientras estaba yo en Madrid, durante la Semana Santa de 2006. Ahora, en septiembre, iré de nuevo a Madrid a encontrarme con mi hija menor, Verónica (Vero, 18) y con mi hijo Luis Daniel (Luisda, 21) con quienes pasaré un par de semanas, ya posteriormente le tocará la oportunidad a la chica mayor, Patricia (Patyk, 23) de poder venir bien sea a Madrid a alguno de estos destinos...
En fin, a continuación un poco de historia reciente sobre mi traslado a estos proyectos.

Como muchos quizás saben, desde hace ya un buen tiempo he estado trabajando para Otepi Consultores como Gerente de Construcción. Estaba a cargo de la Gerencia de Construcción como parte de la Unidad Técnica de Otepi y se estaba gestando un acuerdo con una empresa de ingeniería española para prestarles servicios de ingeniería y apoyo técnico.
Esta empresa española se llama Initec Plantas Industriales, la cual es una de las principales empresas de Ingeniería y Construcción de España y actualmente forma parte del Grupo Técnicas Reunidas.
Pues bien, Initec está en un proceso de crecimiento bastante fuerte, principalmente por la expansión del mercado petrolero en el Medio Oriente, con lo cual, sus requerimientos de profesionales con especialidad en esa área iba "in crescendo". Entonces, como se dice en criollo, se juntaron el hambre con las ganas de comer... por una parte, el hambre de servicios profecionales de Initec con las ganas de comer de Otepi por la falta de proyectos en Venezuela.
Comenzaron las conversaciones y se empezó a abrir un panorama de necesidades por parte de Initec y empezamos a cubrir esas necesidades; se elaboraron listas de potenciales candidatos, de acuerdo a las diferentes disciplinas que se requerían, etc.
Pues, en una de esas se mencionó la necesidad de alguien para el área de contratos de construcción, la cual es mi área, pero en ese momento la verdad es que no tenía yo ningunas intenciones de andar dando brincos por ahí. Propusimos a algunas personas, pero entre esos CV's, también estaba el mío, con lo cual, de pronto me llamaron para una entrevista y como que les parecí adecuado para el puesto... primero vino la negación... "¿yo? ¿a Madrid? ¿lejos de la familia?¿lejos de mis actividades en Caracas?... noooo, ni de broma...", luego las ideas fueron siendo debidamente digeridas y comenzamos, Maite y yo, a ver las oportunidades en medio de la situación; siempre ha sido nuestro punto de vista el que "no hay mal que por bien no venga". Claro, representaba un duro sacrificio.. larga separación, distancias, etc., pero pensamos que podría ser una excelente oportunidad, sobre todo tomando en cuenta que tanto Maite como nuestra prole tienen pasaporte español... el único que no lo tiene soy yo y con esta oportunidad, tendría por lo menos el permiso de residencia... podría significar una serie de puertas que se abrirían, así que decidimos aceptar el reto.
Recogí todos mis macundales, limpié mi escritorio en Terrazas del Avila y el 1 de junio de 2005 fuimos hasta Maiquetía a coger el vuelo de Santa Barbara con destino a Madrid... pues, en el camino, en plena autopista (todavía existía nuestro recordado y famoso viaducto), me llaman de Otepi, de la agencia de viajes, para decirme que el vuelo había sido suspendido y que debía regresar a Caracas hasta que la línea me reubicara en otro vuelo... pues simplemente dijimos que no, que ya estabamos en camino y teníamos que continuar, ya la aerolínea vería qué hacía. En efecto, al llegar, SB me indicó que se había cancelado el vuelo y que me enviarían por Air France.
Así que, por lo menos el viaje de salida fue en mejores condiciones de lo que hubiese sido en SB.
Despedidas fuertes... abrazos y besos y demás y ... hasta lueguitoooo... Lavaka emprendió su camino hacia la Madre Patria...
En la próxima entrega:
- Llegada a Madrid e Initec
- El Camarote
- El Verano
Hasta la próxima!!!!
LuisK
(luego les cuento qué es eso de Lavaka)



1 comentario:

Anónimo dijo...

Luis he pasado un rato superagradable escuchandote, viendo lo que nos muestras y leyendo parte de tu vida, que es parecida a la de muchos de nosotros, que por una u otra razón hemos tenido que salir de nuestro pais.

Sigue poniendonos al día, que Dios te bendiga y que te de fuerzas para soportar el agua hirviendo.

Todo esto nos hace ver lo perfecto de nuestro clima, unos pasamos frio, otros calor, en fin algún día volveremos al paraiso..

Un abrazo

Cuidate.... Elvira